La provincia de San Luis se enfrenta a una sequía que, en algunas localidades, ha acarreado cortes en el suministro de agua y mermas en la presión. En la capital y en Villa Mercedes los respectivos municipios multaron a decenas de ciudadanos por derrochar agua. En Juana Koslay abunda el derroche porque la municipalidad no arregla las pérdidas.
En medio de una severa sequía que afecta a la provincia, en conjunto con el aumento en el consumo de agua por las elevadas temperaturas, algunos municipios -como El Trapiche- declararon la Emergencia Hídrica, y se evalúa declararla a nivel provincial con el objetivo de garantizar el acceso indispensable del recurso para todos los ciudadanos. Sin embargo, en la ciudad de Juana Koslay las cañerías tienen pérdidas y derrochan agua, pero la #PuraGestión no las arregla, algo que ya es común observar en aquella ciudad.
Según publicaron Periodistas en la Red: el agua se escurrió durante el viernes en las manzanas 19 y 14 del barrio Cerros Colorados, proveniente de una pérdida en una cañería en la 18. Mientras esto sucedía, en la manzana 17 -ubicado unos metros más elevada por el desnivel del terreno- penaban por la falta del suministro.
El sábado, el intendente de la ciudad, Jorge “Toti” Videla, fue convocado por el gobierno provincial a una reunión con diferentes jefes comunales para observar la situación en cada uno de los municipios y evaluar la declaración de Emergencia Hídrica provincial. Sin embargo, el lunes las pérdidas continuaban.
Observando la parte “buena” del derrame, una vaca y su ternero aprovecharon el escurrimiento de agua y pudieron saciar su sed gracias a la #PuraGestión.
En otros municipios, como Villa Mercedes o San Luis Ciudad, los funcionarios e inspectores municipales sancionaron a 65 personas -en conjunto- por hacer un mal uso del líquido en una época en donde escasea.
En la capital provincial los inspectores constataron 198 faltas en la utilización del recurso, a las 30 faltas más graves (como llenado de piscinas con agua potable) se les aplicaron multas que oscilan entre los 4 y los 10 mil pesos, señalaron desde Prensa Municipal.
En Villa Mercedes, los inspectores sancionaron a otros 35 ciudadanos que derrochaban el líquido, algunos vecinos fueron sancionados por el llenado de piletas y otros fueron multados por el “regado” de veredas y calles. Según publicó El Diario de la República.
El gobierno provincial baraja la posibilidad de declarar la Emergencia Hídrica y desde San Luis Agua piden limitar el consumo a lo estrictamente necesario (hidratación, alimentación e higiene) para garantizar que todos los vecinos tengan acceso al líquido. Mientras, aún no hay certezas de cuando arribaran las tán ansiadas lluvias.
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