En los últimos días de octubre unas fumigaciones aéreas ilegales dejaron a, al menos, 600 personas con vómitos y diarrea. Además, los agroquímicos afectaron a la flora y contaminaron las huertas de los vecinos que habitan la localidad de General Roca.
Entre el 21 y el 23 de octubre un avión fumigo los cultivos de “Don Panos”, un establecimiento agrícola ubicado en General Roca –Chaco- propiedad del empresario Eduardo Eurnekian, la aeronave realizo los vuelos en condiciones climáticas ventosas y cerca de la ‘zona urbana’. Tan solo unos días después los vecinos de la localidad comenzaron a tener vómitos, diarrea y deshidratación –siendo los niños los más afectados-, las huertas familiares empezaron a verse afectadas y muchos árboles perdieron sus hojas.
“Entre el 21 y 23 de octubre soplaba fuerte el viento desde el Sur y ellos estaban fumigando hace tiempo. Y una avioneta de ellos se arrimaba demasiado al pueblo. Hasta el sábado fumigaron y el día domingo empezaron los síntomas, sobre todo en los más chicos. El lunes ya fue algo general”, contó a LT7 uno de los vecinos del lugar, José María Ferro.
“El lunes a la tarde yo estaba tomando tereré con mi hijo en el frente de mi casa, abajo de una planta de algarrobo, y empezaron a caer las hojas. Como están haciendo siembra de algodón, tiran un desfollante. Y ahora todos los árboles del pueblo quedaron sin hojas”, agregó.
El martes, él y su hijo empezaron con síntomas de intoxicación: vómitos y diarrea.
“Estuve dos días a puro té, con mucha debilidad. Ahora está mi esposa internada. Nuestra suerte es que, dentro de todo el padecimiento, tenemos un hospital acá que nos atienden en el momento y directamente nos mandan a internar”, detalló.
Ferro explicó que los síntomas se extienden a otra localidad cercana, debido a que en Roca hay una instalación de Sameep, la empresa que provee agua en el Chaco, con piletas a cielo abierto que abastecen a 7 localidades.
“Desde siempre advertimos que este emprendimiento monstruoso (…) no le trae grandes beneficios a nuestra población y tiene un impacto visiblemente negativo sobre la producción del pequeño productor y la agricultura familiar”, denuncio Carlos Martínez, candidato a Diputado Nacional del Chaco.
“En el Barrio San Pedro nosotros tenemos una huerta comunitaria, que se fundió todo porque está todo envenenado y era para producir para comedores y merenderos. Tenemos mucha bronca porque no es solamente acá, las fumigaciones produjeron un desastre a muchas plantaciones”, detalló María García, referente de la organización Barrios de Pie en Chaco.
Tras tomar el conocimiento de los hechos, y por visibilidad del acontecimiento, la Secretaría de Desarrollo Territorial y Ambiente de la provincia realizo un trabajo de investigación y toma de muestras en campos de 35 productores de la zona.
Las inspecciones se realizaron en los lugares afectados para verificar el estado de los cultivos y los síntomas que presentan, asimismo se realizaron análisis que permitan conocer los productos aplicados -2-4D o Rondo aparentemente-, y se realizo el acta de inspección a la firma Marfra S.A –la encargada de las fumigaciones- solicitándole documentación que acredite la habilitación para desarrollar los sobrevuelos y la receta agronómica de expendio y aplicación de los productos utilizados.
Las inspecciones determinaron que la empresa realizo las fumigaciones aéreas con vientos que no habilitaban –legalmente- esa práctica y sin receta agronómica para la aplicación de los agrotóxicos.
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